Acerca de este juego

A medida que el clima se vuelve cada vez más inclemente, una morsa que ejerce de guardián de faros recibe a viajeros en busca de un lugar para descansar.
Como guardián, bríndales alojamiento y ocúpate de sus necesidades para sobrevivir a desastres naturales y expandir la aldea en tierra, bajo el mar y en el aire.



El faro ayuda a los viajeros y a las caravanas errantes a orientarse. El guardián debe mantener el fuego encendido, ya que, si se extinguiese, el lugar quedaría aislado del mundo exterior.





El guardián recibe regularmente a viajeros antropomórficos en la aldea. Cada uno de ellos es único y cuenta con conocimientos y características propias, pero también con peticiones que tendrás que satisfacer. Ten en cuenta dicha información para construir una comunidad sostenible y habitable.





Mucha gente surca los mares de Diluvian, y el faro es el punto de encuentro ideal para los mercaderes en busca de recursos. Comercia con ellos y mantén relaciones de confianza con sus gremios para aumentar la cantidad de servicios que ofrecen.





Al anochecer, el guardián siempre comparte un almuerzo con los viajeros y se encarga de elegir el menú en función de los ingredientes disponibles. Sus recetas gozan de buena fama entre los viajeros, aunque algunos aseguran que pueden ser un tanto «experimentales».





El guardián se ha reencontrado con su primo y, gracias a su máquina voladora, ahora es posible emprender expediciones. Elige una ruta en el mapa y asigna a los viajeros más intrépidos para explorar los alrededores. Pero decide con cabeza, puesto que cada zona, ruta y miembro de la dotación condicionarán el éxito de la expedición.





El parte meteorológico afectará a las distintas fases del juego, como la producción o el fuego del faro. Además, necesitarás tener cuidado con los desastres naturales, como los tsunamis o las erupciones submarinas.