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Los Nigromantes se componen de Hombres Lobo, Golems, Necrófagos y Tumularios.

Los muertos no descansan tranquilos en los cementerios del Viejo Mundo. Tan solo era cuestión de tiempo que un Nigromante decidiera encadenar a estas imparables máquinas de matar con poderosas magias arcanas y templar sus sufridas almas con un partido de Blood Bowl.

Los Nigromantes son una raza muy versátil, pero sus mejores jugadores son los Hombres Lobo. Estas letales máquinas de matar son su fuerza de ataque principal, suministrando pura furia psicopática y unas garras que pueden dejar armaduras totalmente inútiles.

El principal dilema para un entrenador Nigromante es cómo sustituir a sus jugadores más especializados cuando son machacados en el suelo, ya que no vuelven a resurgir. Los Necrófagos son fáciles de encontrar, arrastrándose por cualquier viejo cementerio en mitad de la noche, pero reemplazar a los jugadores más útiles, como los Golems y Hombres Lobo, pueden costar una cantidad considerable.