Comprar Heist Kitty: Cats Go a Stray

Acerca de este juego

¿En qué piensan los michis mientras toman el sol? ¿En raspitas de pescado? ¿En ovillitos de lana? Y un cuerno: piensan en arrasar con todo. En sembrar el pánico. Amiguitos humanos, ha llegado la hora de elegir a un minino, desatar el caos felino y llevarse el gato al agua en Heist Kitty: Los michis se desmadran.

Caos gatuno multijugador

¿Qué pasa cuando a uno le dan gato por liebre*? Pues que el peque devasta toda la ciudad. Ponte en la piel de un gatete de lo más gamberro y siembra el caos en este (arenero) sandbox multijugador de mundo abierto. Líala por tu cuenta o desmádrate con tus amigos. Mueve el pandero en la pista de baile, márcate récords en las recreativas y dedícate a robar coches y conducir a toda pastilla por las calles.
*No se practicó comercio con animales durante la elaboración de la presente metáfora.

¿De qué lado estás?

Te damos la bienvenida a Kitty City, donde el Cuerpo de Pelicía del comisario Hairris lucha constantemente por ir siempre un paso por delante de la taimada Miaufia de Tawny Catatelli. Por desgracia para el comisario, encarcelar a los felinos más perversos de la ciudad es... Bueno, digamos que «aquí hay gato encerrado» no pasa de ser una frase hecha. Sal a la calle y trabaja como poli gatuno o acepta encargos del hampa. Da igual en qué bando acabes: te espera desmadre felino para dar, vender y regalar.

Conviértete en el gato pelmazo definitivo

Los únicos gatos que siguen las normas son los que no han pillado cómo va la cosa. Vayas adonde vayas, asegúrate de dejar un rastro de destrucción allá por donde pases. Tira vasos al suelo, pon las tiendas patas arriba o ataca a los humanos con armas inconcebiblemente sofisticadas, imposibles de construir sin pulgares oponibles. Y no te preocupes por las repercusiones: la palabra «consecuencias» no existe en gatuno.