Acerca de este juego

¡Te damos la bienvenida a las Galerías Betterman! Es oficial: ya formas parte del equipo de recuperadores de artefactos para las galerías del Detentador. ¿No tienes experiencia? No pasa nada; sigue el protocolo y lánzate de cabeza a la aventura (literalmente).

El primer paso del turno es la descongelación. Hasta 8 jugadores se podrán descongelar a la vez. Los órganos pican un poco mientras se despiertan.

Cada portal lleva a una nueva dimensión impredecible y hostil, con sus propias reglas extrañas y sorprendentes.

Para manteneros en contacto, podréis usar la voz, banderas, bengalas o incluso ecos de las almas de los compañeros caídos.

Recuperad todo lo que podría encajar en la colección del Detentador. ¿Una planta carnívora? ¡Claro! ¿Teteras flotantes? Por qué no. ¿Enormes calcetines brillantes? ¡Por supuesto!

Mostrad vuestros hallazgos y colocadlos del mejor modo posible para crear una atmósfera elegante y acogedora. Pero no llaméis mucho la atención: el Detentador valora la belleza del espacio, no vuestra presencia.

Limpiaos todo ese pringue interdimensional. El Detentador insiste en mantener la mansión limpia, así que no es admisible que unos meros curritos vayan dejando todo manchado de pringue.

Si tenéis tiempo, recargad las pilas con una reconfortante taza de café bien calentita. ¡Sentíos personas durante cinco minutitos!

¡Saltad al portal siguiente! Cada misión será una nueva dimensión caótica por explorar.

El Detentador os agradece vuestros servicios (y os recuerda que evitéis los gritos cuando estéis en las galerías).


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