Contenido descargable

Acerca de este contenido

Pilotos

Esta opción refleja la creciente inexperiencia de los pilotos japoneses.

Japón esperaba un conflicto breve con las potencias occidentales. Contaba con pilotos de élite muy hábiles, pero con muy pocos programas de entrenamiento. A medida que la guerra se prolongaba, la calidad general de los pilotos empezó a deteriorarse rápidamente, sobre todo tras las batallas de desgaste de Midway y Guadalcanal.

Un nuevo escenario: Mar de Filipinas 1944

Este escenario abarca 3 operaciones importantes de Estados Unidos durante el verano del 44: Asegurando las islas de Saipán, Guam y Palaos.

Junio del 44, con las dos principales bases navales, Rabaul y Truk, neutralizadas, el camino hacia las islas Marianas quedaba despejado. Su captura permitiría a los bombarderos estratégicos B-29 llegar a Japón. Los japoneses eran conscientes de la amenaza y se esforzaron por enviar más fuerzas terrestres a las islas Marianas. Sin embargo, la mayor parte de los refuerzos fueron interceptados y hundidos por submarinos estadounidenses. La batalla del Mar de Filipinas sería la mayor y última batalla de portaaviones de la Segunda Guerra Mundial. La Armada Imperial Japonesa perdió gran parte de su poderío aéreo y no pudo oponer una resistencia creíble a nuevas incursiones estadounidenses en el perímetro defensivo japonés. La invasión de Palaos tenía un interés dudoso y resultó ser una masacre.